Extraída directamente del Manantial, el Agua termal de Avène conserva intactas todas sus propiedades calmantes, desensibilizantes y suavizantes.
Una sensación de suavidad te envuelve y te alivia. Es toda la delicadeza y la pureza del Agua termal de Avène, que te protege de forma duradera.
Úsala para:
• Post procedimiento estético.
• Piel maltratada.
• Si hay rojeces en el rostro por la sensibilidad de la piel.
• En caso de imperfecciones en la piel.
• Después de una sobre exposición solar.
• Para alteraciones del pañal del bebé.
• Después de desmaquillarse.
• Post afeitado.
• Post depilación.
• Después de hacer deporte.
• Durante un viaje.
• Para refrescarse.