Viajar con tu bebé o con tus niños no tiene que convertirse en una odisea o, peor aún, en una pesadilla. Si bien resulta ser más complicado que viajar solo o en pareja, si te preparas y organizas bien podrás tener todo controlado para que el viaje sea una experiencia grata y satisfactoria.
No es lo mismo que viajen en avión a hacerlo por tierra, pues cada uno tiene más restricciones y complicaciones que el otro. Si viajas en avión, por ejemplo, tendrás que volverte sumamente práctica para poder llevar lo estrictamente necesario, pues, por un lado, son menos las cosas permitidas para transportar (por espacio, costos, seguridad, etc.) y, por el otro, por tu comodidad y la de tu familia para que no se estresen con el empaque y transporte de sus pertenencias.
El viaje en carro, por el contrario, les da la posibilidad de poder empacar muchas más cosas que les podrán ser de utilidad en el viaje, lo cual les representará una mayor comodidad y tranquilidad.
Si viajan en avión
· Una de las cosas con las que más sufren los papás en sus viajes con sus bebés en avión son los molestos dolores de oídos ocasionados por los cambios en la presión del aire. Por ello, entre algunas de las recomendaciones de los especialistas están:
– Dale un biberón, chupo, o amamanta a tu bebé durante los momentos en que los cambios de presión en la cabina pueden ser mayores: durante el despegue y en el descenso inicial. Si tu niño es mayor de 2 años, recomiéndale bostezar para aliviar la molestia en sus oídos.
– Es importante que tengas en cuenta que, si tu niño tiene una molestia significativa en sus oídos asociada con un resfriado o infección de oído, es posible que sea mejor que pospongas el vuelo, en lo posible.
· Si es un vuelo que va a durar más de 2 horas, es importante que lleves todas aquellas cosas que van a suplir las necesidades de tu bebé, esto es, suficientes pañales, la leche de fórmula (si no estás lactando) y agua embotellada (comprada después de pasar los controles de seguridad) para prepararla, toallitas, así como algo para entretener a tu bebé, etc.
· Si vas a viajar con tu hijo mayor de 2 años, no olvides empacarle en su equipaje de mano lo siguiente: un libro de pintar o colorear y crayones, su animal de peluche favorito, un libro con ilustraciones emergentes, calcomanías o cuentos. Por otro lado, no estaría mal si pudieras hacer uso de la tecnología para entretenerlo, así que si tienes un reproductor de DVD portátil en el que puedas ponerle una película para niños, será perfecto. También son una opción los Nintendo portátiles y cualquier juego de iPad o iPod.
· Por otro lado, no olvides, de igual forma, que siempre es bueno que le lleves su propia merienda, ya que puede ser posible que no le guste mucho la comida del avión. Por lo tanto, carga suficientes snacks y refrigerios para la duración del viaje.
· Es bueno que si piensas que tu hijo puede llegar a sufrir de mareo en el avión consultes con su pediatra la posibilidad de darle algún medicamento para prevenir y tratar el mareo, las náuseas y el vómito. No les des a tus hijos ningún medicamento que no haya sido recetado por su pediatra, pues puede ser perjudicial para su salud.
Si viajan en carro
Un viaje por tierra te da la posibilidad de empacar más, por ello, una buena idea es que hagas una lista de todo lo que vas a necesitar, tanto para el trayecto como para el sitio al que van, pues, dependiendo del lugar al que se dirijan, así también serán los requerimientos y necesidades para tus niños o tu bebé.
Es importante, de igual forma, que al viajar con bebés y niños pequeños los padres se cercioren de que los asientos especiales para ellos estén perfectamente ajustados y en la posición correcta y segura. Comprueba que el arnés y el cinturón están en perfecto estado y no quedan flojos ni doblados.
Por otro lado, dependiendo de la distancia del recorrido es bueno que tengas en cuenta lo siguiente:
– Realiza paradas cada 2 horas para que los niños estiren las piernas y tomen aire.
– Llévales juguetes o artículos con los que se puedan distraer y recurre a estrategias de entretención, como cantar o contarles un cuento o historias durante el trayecto del viaje. Un buen tip es llevarles juguetes nuevos, pues ellos estarán más interesados en jugar con ellos que quizás que con los juguetes que ya poseen y conocen muy bien.
– Es bueno que tengas un bolso de primera mano en el que lleves lo esencial en caso de situaciones de emergencia como, por ejemplo, que tu niño se vomite. Empaca entonces una muda de ropa limpia, pañales (si aún los utiliza), crema antipañalitis, pañitos húmedos, y un biberón o vaso portátil con agua.
– Ante cualquier imprevisto es mejor estar preparados, así que no olvides incluir dentro del equipaje un pequeño kit de primeros auxilios o botiquín.
– Antes de tu viaje consulta con el pediatra de tu niño si es posible darle algún tipo de medicamento para prevenir o tratar el mareo, las náuseas y el vómito.
– Para los viajes por tierra, sobre todo si son largos, también es bueno que los padres sean precavidos y lleven consigo un bolso con diferentes snacks, bocadillos o meriendas, cosa que, en caso de que la siguiente parada para comer no esté muy cercana, los niños no se desesperen por tener hambre y no tengan qué comer por un largo período de tiempo.
– Viajar con niños no es fácil, y no todos tienen la paciencia para permanecer sentados por largo tiempo, así que algunos recomiendan que lo ideal para hacer viajes extensos con niños es realizarlos en las horas de la noche, de esta forma, estos pueden dormir todo el camino y las paradas serán menores, solo para gasolina o entrar al baño.